Así lo han informado fuentes de la compañía, que han apuntado que el objetivo es dar garantías de que DIA «tiene futuro» en un momento delicado para el grupo, que atraviesa por dificultades financieras y es objeto de una opa por parte de su mayor accionista, el multimillonario ruso Mijaíl Fridman.
En la cita con sus proveedores- tanto de marca propia como de marca de fabricante, y a la que acudieron cerca de 800 personas, según sus cálculos-, los gestores de la empresa les transmitieron qué pasos están dando ahora y les dieron detalles sobre su proyecto.
También recibieron las quejas y reclamaciones del colectivo y les aseguraron que la firma entra en una «nueva etapa», tras enviar un «mensaje de tranquilidad» al incidir en que los clientes siguen acudiendo a las tiendas y recordar el acuerdo ya alcanzado con la banca acreedora para alargar el vencimiento de varias líneas de crédito.
El consejero delegado, Borja de la Cierva, ha participó en este encuentro junto con varios de sus directivos.
En el caso de la reunión con los sindicatos, el punto central será la constitución de la comisión negociadora del Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
El pasado 8 de febrero, el equipo directivo de DIA ya anunció la puesta en marca de un proceso de despido colectivo en España que afectará «a un máximo de 2.100 contratos de trabajo».
Actualmente, la cadena emplea a cerca de 26.000 trabajadores en el país, de acuerdo con sus propios datos
