El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha informado de que en caso de confirmarse esta cifra, se trataría de un nuevo máximo desde que arrancara la serie histórica, en 1990.
Desde 2012 la renta agraria ha crecido un 31,4 %, de acuerdo con los datos del Ejecutivo, que ha destacado ha evolucionado al alza de forma ininterrumpida en estos seis últimos años.
Por su parte, la renta agraria por unidad de trabajo anual acabará el ejercicio en torno a los 34.787 euros, un 4,7 % superior a la de 2017.
Esta subida se debe no sólo a la mejora de los ingresos, sino también a la bajada del 1,2 % de la Unidad de Trabajo Agrario (es decir, el trabajo realizado por una persona dedicada a tiempo completo durante un año a esta actividad), de acuerdo con estas mismas fuentes.
El aumento de la renta agraria se produce de forma paralela al incremento de la producción, que también ha batido un récord al superar los 53.000 millones de euros.
Por categorías, la producción vegetal se incrementó en un 6,5 %, hasta superar los 32.000 millones de euros, gracias sobre todo al «buen año hidrológico».
De hecho, se registraron «fuertes» subidas en cereales (+43 %), plantas forrajeras (+25 %) y vino y mosto (+18 %).
Por el contrario, los precios de los productos vegetales cayeron un 0,3 %, especialmente perjudicados por el desplome registrado en el aceite de oliva (-24 %) y el vino (-5 %), categorías que en 2017 vivieron «máximos históricos».
La producción animal creció un 4,5 %, hasta rondar los 21.000 millones de euros, según se desprende de los datos divulgados hoy por el Ministerio, que destaca las subidas de los huevos (+6,9 %), el porcino (+6,4 %) y las aves (+5,2 %).
Sin embargo, los precios cayeron en los productos de origen animal un 1,8 %, con el porcino como líder de las bajadas (-6,2 %).
Los consumos intermedios, por su parte, cerrarán 2018 con un aumento del 6,2 %.
Desde el Ministerio, además, han precisado que las subvenciones al sector «se mantuvieron prácticamente constantes con respecto a 2017».