La falta de mano de obra en el mes de agosto es práctica habitual en la horticultura almeriese y granadina, pero este año se recrudece la situación porque muchos operarios de origen del Este de Europa no volverán durante la presente campaña. Son «trabajadores de Bulgaria, Rumanía, Ucrania o Lituania, que han encontrado espacio laboral en sus países de origen, porque la economía de estos países ha ido mejorando y son más los ciudadanos de estos destinos los que van volviendo sus lugares de origen», señala Juan Campoy, director de Atenix.
Esta opinión es asumida por los propios instaladores, ya que muchas cuadrillas de montaje de plástico se encuentran más incompletas que nunca y esta falta de mano de obra también está afectando a los agricultores.
«Tradicionalmente agosto ha sido un mes complicado porque muchos inmigrantes vuelven a su país durante el periodo de vacaciones y no vuelven hasta que pasa el calor, pero este año se une la falta de trabajadores que solían pasar aquí el verano y se incorporaban a finales de agosto, y en este año algunos han dejado de estar en España y han vuelto a sus países», señala el horticultor Antonio Román.
Los ritmos de trasplante están yendo algo más lento que en otras campañas, aunque «a nuestro favor tenemos que las temperaturas no están siendo tan altas y se consigue trabajar en mejores condiciones y las plantaciones no van a un ritmo tan alto de crecimiento», apunta Román.