El acuerdo a largo plazo, anunciado por primera vez el pasado julio, estará regido por ciclos operativos de tres años y cubrirá «las relaciones estratégicas con los proveedores así como la compra en común de productos de marca propia» y de otros bienes.
Las compañías explicaron en julio que el objetivo es «mejorar el aprovisionamiento y la calidad de los productos a precios todavía más bajos en beneficio de los clientes,» lo que permitirá aumentar la competitividad de las dos marcas y abrir nuevas oportunidades a sus proveedores, a nivel nacional e internacional.