Los exportadores argentinos son conscientes de que el mercado europeo se va reduciendo y sus exportaciones han ido cayendo en los últimos años. Argentina vió descender sus exportaciones durante 2017 en un 15 por ciento, ya que Europa ha sabido ampliar sus ventanas comerciales con manzana doméstica hasta el verano.
Esta tendencia de mercado afecta a Argentina que es la primera exportadora de peras del Hemisferio Sur y la quinta en manzanas a nivel mundial, gracias a las 50.000 hectáreas productivas, que en un 85 por ciento se encuentran en la región de Rio Negro.
Argentina cuenta con 4.000 productores, 220 empresas con cámaras frigo y 11 empresas para realizar zumos concentrados según la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI).
Existe preocupación entre los políticos argentinos porque esta empresa genera 50.000 puestos de trabajo directos y 15.000 indirectos y tiene un peso importante en Rio Negro y Neuquen.
Argentina exporta sobre 280.000 toneladas de manzana y la compra de la UE se podría reducir a unas 12.000 toneladas, lo que supone un descenso por encima del 50 por ciento. Muchos puestos de trabajo están en entredicho.