Según ha explicado hoy el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, seis millones se dedicarán a la reparación de infraestructuras de comunidades de regantes, para lo que se ha contratado por la vía de urgencia a doce empresas que actuarán en las reas en las que se han dividido las afecciones de la crecida, registrada entre del 13 al 17 del pasado mes de abril.
Estas actuaciones comenzarán a final de semana, salvo que el tiempo lo impida, diez en la ribera de Ebro y una en la del Arba y la del Jalón, respectivamente, comenzando por las zonas que no requieren informes ambientales, que se están realizando sobre las zonas que sí los necesitan con la perspectiva de que estén listos la próxima semana, según ha detallado el director general de Desarrollo Rural, Jesús Nogués.
La empresa pública Sarga se encargará de redactar las memorias y de la coordinación de seguridad y salud y vigilancia ambiental en estas actuaciones.
Los otros 6,4 millones de euros se dedicarán a compensar los daños en cultivos y en infraestructuras de explotaciones agrarias particulares, para cultivos asegurados o que en el momento de la crecida estuviera abierto el plazo para el aseguramiento siempre que la parcela estuviera asegurada el año pasado.
Los agricultores afectados pueden ya levantar un acta de no inicio para empezar a reparar las afecciones en sus instalaciones dando parte a la las Oficinas Comarcales Agroambientales (OCA) y pedir posteriormente la subvención, una vez publicada la convocatoria.
«Hemos actuado con la mayor urgencia posible», ha asegurado Olona, quien ha exigido al Ministerio de Agricultura que cumpla su compromiso de declarar de emergencia las actuaciones que son de su competencia -el dominio público hidráulico- y aporte las cantidades que anunció la semana pasada la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García Rodríguez.
En concreto, avanzó en Zaragoza el pasado día 21 que el Ministerio de Medio Ambiente comenzaría esa misma semana la primera fase de los trabajos para la reparación de los daños causados por la última crecida del Ebro, estimados en 6,5 millones de euros, a los que sumarían otros 20 o 25 millones, sin que se puedan acometer hasta que baje del todo el nivel de las aguas.
Así, ha exigido al Ministerio que actúe en el ámbito de su competencia y le ha pedido que colabore en el ámbito agrario y ayude a hacer frente a estos daños.
Además, ha anunciado que el próximo 12 de junio se reunirá con la secretaria de Estado, y además de tratar este asunto, para el consejero es preciso que se aborden actuaciones urgentes que no están directamente relacionadas con esta riada, sino con la prevención, con medidas eficaces para evitar que las crecidas se repitan de forma tan recurrente, poniendo el acento en los núcleos urbanos.
Y aunque este fin se semana algunos ríos han experimentado crecidas por las fuertes precipitaciones, se han producido sobre daños ya cuantificados y no se prevén desbordamientos del Ebro en estos momentos.
No obstante, habrá una nueva inspección y control sobre las consecuencias de las tormentas.