La compañía ha recibido esta distinción en un acto celebrado en sus instalaciones y al que han acudido la secretaria de Estado de Comercio, Marisa Poncela, y el director general financiero de Lidl Supermercados, Ferran Figueras, entre otros responsables.
Durante la visita a la planta, Poncela ha conocido el sistema por el que los residuos se clasifican en 22 categorías después de ser debidamente separados, con el cartón como el más numeroso (54 por cietno), seguido de plástico y textil (7 por ciento) y de alimentación seca, chatarra y madera (2 por ciento).
El uso de estos residuos es variado, y mientras el cartón, la madera, el plástico y la chatarra se usan como nueva materia prima una vez valorizados, el textil se transforma en hilos o trapos y la alimentación seca se reutiliza en pienso para animales.
Finalmente, el 16 por ciento de los residuos considerados «basura» -fundamentalmente restos de alimentos frescos no aptos para el consumo- también se ha conseguido reutilizarlos, convirtiendo los inorgánicos en combustible sólido recuperado (11 por ciento) y los orgánicos en compost (89 por ciento).