Lidl, que el año pasado facturó 68.600 millones de euros, de ellos 20.000 millones en Alemania, quiere abrir en un periodo de un año unos 100 supermercados en la Costa Este estadounidense.
«EEUU es un mercado atractivo, especialmente para los supermercados de descuento. En competencia con Aldi, la popularidad del surtido, el precio, la situación y el formato serán decisivos para los clientes. Lidl será con seguridad un desafiante, que hay que tomar cada vez más en serio y que Aldi conoce bien en el mercado de origen», dijo a EFE Falco Weidemeyer, socio senior de la consultora Roland Berger.
Aldi, el descubridor de los supermercados de descuento y con presencia en EEUU desde 1976, anunció recientemente que va a abrir más establecimientos en este país.