Lo único que queda por el momento excluido del acuerdo alcanzado son las exportaciones de tomates turcos a Rusia. «Durante este mes de mayo se levantarán del todo varias restricciones en contratación, asesoría técnica, agencias de viaje, hostelería y licitaciones públicas, en total en seis sectores en las que había limitaciones para empresas turcas», precisó Yildirim.
El incidente del avión derribado provocó una seria crisis política entre ambos países, incluyendo una interrupción temporal de las llegadas de turistas rusos a Turquía, lo que golpeo severamente al sector turístico del país eurasiático. El verano pasado, los países empezaron a acercarse de nuevo y la mayor parte de las sanciones rusas se levantaron.