La temporada de pimientos en Polonia llega a su fin y todas las cadenas han dejado de disponer oferta local. Biedronka y Dino Polska han sido las últimas cadenas en tener pimientos en las tiendas del sur y ya está introducido totalmente el pimiento de origen español.
Los precios se han disparado de manera considerable, porque el precio del producto en origen se encuentra alto por las dificultades por el T. parvispinus.
El colectivo de productores húngaros (FruitVeb) ha informado que el precio de los pimientos California rojos ha pasado de medias de 90 céntimos a superar los 1,75 euros en noviembre, y lo mismo ha pasado con los Californias verdes y amarillos.
Es cierto que «conforme pasan los días, la oferta española va mejorando y se ven mejores calidades en los lineales y las partidas llegan más limpias», señalan desde el colectivo FruitVeb, que también ha visto cómo la llegada del pimiento español es ya reconocible en las cadenas húngaras.
Además, la oferta de Países Bajos ha finalizado antes de lo previsto y esto provoca una mayor presión al alza de la oferta española.




















