La entrada en vigor este martes de aranceles del 25 % a productos mexicanos, impulsada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado el inicio de una guerra comercial y supone un disparo a la línea de flotación de la voluminosa relación económica bilateral.
Pese a los esfuerzos inútiles de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, y su gabinete por frenar la medida, el impacto sobre sectores clave de la economía es inminente, en medio de proyecciones que apuntan a una recesión en México.
El sector agrícola, muy afectado
El sector agrícola enfrenta un impacto directo. México suministra casi uno de cada cuatro alimentos que consumen los estadounidenses, según datos del Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
Aproximadamente, el 50 % de los tomates y el 80 % del aguacate que se consume en EE.UU. es importado de México. Además, el país también es responsable del 70 % de las hortalizas y el 50 % de las frutas que consumen los estadounidenses.