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La subasta que surgió de la revisión del modelo

Agroejido dispara sus cifras desde una estrategia basada en la combinación de los valores tradicionales de la subasta y una visión más mercantil y comercial del negocio.

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El crecimiento de Agroejido ha llegado para quedarse y es la cuarta empresa española que más ha crecido durante 2021-2023. No es un crecimiento espontáneo ni derivado por las crisis de otras iniciativas en el segmento subasta, sino es un crecimiento con criterio.

La primera base es la juventud de sus proveedores y productores. “La subasta siempre se ha vinculado a un proyecto agotado, sin regeneración de agricultores y con una edad media alta. Nuestro proyecto está repleto de productores jóvenes”, desvela Francisco Gómez (en la imagen), gerente de la empresa.

Tres líneas de trabajo

Hoy Agroejido cuenta con tres líneas de trabajo, de las que dos están más cerca de la atención al cliente de destino y la primera en el sistema tradicional de comercio en origen -subasta-, “sin perder la visión de conseguir el mejor precio para los productores”, señala Gómez.

Agroejido cuenta con una línea comercial directa con clientes con precios y programas cerrados semanalmente con mayoristas y cadenas UE, lo que supone un nuevo aire para el modelo de subasta

“Hemos apuntalado nuestra actividad en un equipo comercial potente tanto para productores como para hacer seguimiento al cliente en destino”, exponen.

Internacionalización

La empresa elevó sus operaciones internacionales y pasó de los 70 millones de euros en 2022 a los 101 millones de euros en 2023, y las cifras de 2024 vienen al alza.

Agroejido tiene en Francia, Italia y Portugal sus tres destinos internacionales más importantes, operando tanto con mayoristas como con ‘category’ de cadenas italianas.