El peso del ‘bio’ en la gran distribución francesa vuelve a subir y pasa de un descenso del 4,7 por ciento a principios de 2023 a un repunte del 4,4 por ciento en el segundo trimestre de 2024.
Estas cifras están lejos de los niveles tradicionales de consumo en todas las categorías, pero supone aire para la industria ‘bio’.
La recuperación se debe al incremento de ventas de las marcas blancas de los distribuidores ecológicos en la gama de procesados y en el incremento de la distribución especializada, que ya durante el año pasado sí dio la cara, con un repunte inferior al uno por ciento con respecto al ejercicio 2022.
Los datos
Las ventas en el circuito orgánico especializado durante el primer semestre se incrementaron en un 8,4 por ciento y las ventas directas entre productor y consumidor lo hicieron en un tres por ciento, según los datos adelantados por Agence Bio.
Las ventas en el canal supermercado no terminan de avanzar y reflejaron pérdidas en el segmento ‘bio’ del cinco por ciento con respecto al primer semestre de 2023.
En el segmento de frutas y hortalizas, los comercios especializados siguen liderando las ventas de las frutas y hortalizas, como refleja la publicación +Eco en su nueva edición.
Un 30 % más de cierres
El sector ganadero es el que peor lo lleva y el de las frutas y hortalizas, el que mejor entre los productores franceses.
El grueso de los productores y ganaderos en Francia no lo llevan bien, ya que este repunte de la demanda ‘bio’ en global no ha frenado el cierre de granjas o iniciativas.
Francia ha visto cómo se han incrementado en un 30 por ciento el cierre de fincas o iniciativas de productores con respecto al mismo periodo del primer semestre de 2023.
En algunos casos son cierres del proyecto, y en otros casos es retomar la agricultura convencional o de otro tipo en detrimento del proyecto ecológico.