El sector primario español se ha reactivado, tras haber sufrido los efectos del aumento de costes de producción y la sequía, y crece un 7,6 % en el primer semestre del año, según un informe publicado por CaixaBank Research.
A pesar de que algunos cultivos continúan lastrados por las condiciones hidrológicas adversas, se atisba una incipiente mejora general y la actividad crece a ritmos superiores al conjunto de la economía, indica el estudio.
Los precios de los alimentos acumulan una subida del 30,7 % desde diciembre de 2019, pero se prevé que el abaratamiento de las materias primas agrícolas y de la energía en los próximos trimestres ayude a moderar las presiones inflacionistas sobre los productos alimentarios.
Aumento del valor de la producción
Desde que el sector primario tocó fondo a fondo a finales de 2022, acumula un crecimiento del 20 %, si bien el Valor Añadido Bruto (VAB) se encuentra un 6,2 % por debajo del nivel prepandemia, mientras que el conjunto de la economía española está un 5,7 % por encima de ese nivel de referencia.
Con todo, «la tendencia es a la reactivación y la recuperación», ha señalado al presentar el informe la economista de CaixaBank Research Judit Montoriol.
Valor de la producción agraria
El valor de la producción agraria se incrementó en un 4 % el año pasado, gracias en gran medida al aumento de los precios (13,1 %), lo que compensó un descenso del volumen de producción del 8 %.
La producción vegetal se vio especialmente afectada por la sequía y cayó un 12,2 %. Las cosechas en las que predomina el secano fueron las más perjudicadas, con caídas abultadas en el aceite de oliva (-58,6 %), cereales (-34,8 %), y el vino y el mosto (21,1 %).
Por el contrario, las producciones más ligadas al regadío tuvieron mejor comportamiento. Destaca el incremento de la producción de frutas (4,6 %), que se benefició además de un aumento del 15,8 % en los precios.
El regadío da cuenta de aproximadamente dos tercios de la producción vegetal en España, aunque ocupa un 22 % de la superficie plantada, gracias a su mayor rendimiento.
La industria alimentaria también comienza a reactivarse: la producción industrial creció un 1,9 % interanual en la primera mitad de 2024 gracias a la moderación en el crecimiento de los costes de producción, señala el informe.
Este buen comportamiento también se refleja en las cifras del mercado laboral. La industria alimentaria ha creado cerca de 10.000 empleos en el último año hasta agosto.
Aumentan las exportaciones
Las exportaciones agroalimentarias, en particular, están superando el entorno adverso de los últimos años, marcados por climatología y geopolítica adversas. La mejora de la producción ha permitido que las exportaciones hayan crecido un 3 % interanual en volumen tras dos años consecutivos de retrocesos.
En términos de valor, los ritmos de avance son más significativos (un 5,9 % en el primer semestre) gracias al alza en los precios que han registrado la mayoría de los productos agroalimentarios en los mercados internacionales.
Al analizar los cuatro grandes grupos de exportaciones agroalimentarias (frutas, legumbres y hortalizas, bebidas, y carnes), tan solo se han visto lastradas en el último año las de carne, debido a una corrección de las ventas de porcino a China.
La Unión Europea continúa siendo el principal mercado para el sector primario español y representa en torno a las dos terceras partes de las exportaciones, con Alemania y Francia a la cabeza, al representar cerca de un tercio de las ventas.
La caída más pronunciada de ventas al exterior se registra en el Reino Unido, que pasa de representar el 7,9 % de las exportaciones en el periodo 2014-2019 hasta el actual 6,9 %, debido a las barreras comerciales levantadas tras el Brexit.