Más de ocho de cada 10 consumidores (81%) han admitido que no conocen la forma correcta de conservar las piñas y que las comen más tarde de lo ideal.
La investigación del productor líder mundial de frutas tropicales frescas, Fyffes, coincide con el lanzamiento de las nuevas “piñas sin corona” de Fyffes en Europa.
Fyffes evaluó los hábitos de consumo, la conciencia y el conocimiento sobre las piñas entre más de 1.000 consumidores del Reino Unido e Irlanda, para revelar que sólo el 19% sabe que la mejor manera de almacenar una piña es troceándola y ponerla en el refrigerador, y casi un tercio (31%) deja una piña para que «madure» en un frutero, algo común.
Fyffes ya está firmemente comprometido con la producción responsable, como lo ilustra su objetivo de reducir los gases de efecto invernadero, respaldado por la iniciativa Science Based Target y su trabajo sobre la debida diligencia en materia de derechos humanos.
Piñas sin corona
La llegada de las piñas sin corona de Fyffes al mercado europeo presenta mayores beneficios de sostenibilidad para ambos minoristas y consumidores. Para los minoristas, las piñas sin corona presentan la oportunidad de reducir las emisiones de carbono significativamente, ya que se pueden transportar más de un 30% más de piñas sin corona, ya que ocupan mucho menos espacio.
Las coronas retiradas se replantan en los campos de piña o se trituran y se entregan a los agricultores locales para que las utilicen para alimentación animal. Para los consumidores, las piñas sin corona minimizan los residuos orgánicos y reducen el tiempo y esfuerzo que implica la preparación.
Si bien muchos consumidores pueden asociar principalmente a Fyffes con los plátanos, la empresa también es una importante empresa mundial.
proveedor de piñas, melones y otras frutas exóticas. Los resultados apuntan a una falta de conciencia sobre piñas en general, y casi dos de cada cinco (39%) encuestados desconocen los beneficios para la salud.
Los beneficios de la piña incluyen su alto contenido en vitamina C, manganeso, fibra y su potencial para ayudar a la digestión.
y reducir la inflamación.
La encuesta también apunta a un aumento del consumidor preocupado por la sostenibilidad: más de dos de cada cinco (43%) de los encuestados consideran importante que las piñas que compran sean de origen sostenible y ético.
El 64% de los encuestados dijeron que estarían dispuestos a pagar más por productos producidos de forma sostenible y ética.
Otras conclusiones de la investigación son:
• Más de la mitad (54%) de los encuestados ha aumentado su consumo de fruta en los últimos seis meses.
• La frescura (32%), el precio (17%) y la madurez (17%) son los factores más importantes para los consumidores cuando compran piñas.
• El 79% de los consumidores están satisfechos con la calidad de las piñas disponibles en sus tiendas locales.
