Ambas comparten su gran tamaño (G), así como su atractivo color rojo, firmeza y consistencia; pero su principal diferencia radica en el ciclo de cultivo.
De este modo, y según explica Javier Oliver Fernández, delegado comercial en el Poniente almeriense de Harmoniz, “Cosmostar está recomendado para hacer ciclos cortos tanto en el Poniente como el Levante, mientras que Constelación es una variedad para ciclo largo”.
En el caso del primero, está indicado para trasplantes desde principios de agosto, para otoño, y desde febrero, para primavera. Cosmostar es una variedad precoz, lo que facilita un segundo ciclo, de planta fuerte, equilibrada y muy versátil, “adaptada a todas las condiciones de cultivo”, tanto en convencional como en ecológico.
Destaca, asimismo, por su productividad, permitiendo hacer entre 10-12 ramos con entre 6-8 piezas cada uno. Sus frutos son macizos y pesados (150-160 g), de un color rojo intenso, uniformes todo el ciclo. No presentan problemas de rajado y tienen, además, “una buena postcosecha” para llegar a destino con todas las garantías.
Cuenta con resistencias al virus de la cuchara (TYLCV) y spotted (TSWV), así como con buena tolerancia al virus del rugoso (ToBRFV).
Todas estas cualidades le han permitido ganarse la confianza del agricultor desde su llegada al mercado hace ya cuatro años y, de hecho, según Fernández, “sus ventas crecen anualmente”.
Constelación es, por su parte, una variedad para ciclo largo, con trasplantes desde finales de agosto, que destaca por su buena capacidad de cuaje durante todo el ciclo y precocidad en la recolección.
Sus ramos son homogéneos, de entre 7-8 tomates de calibre G (140-160 g) hasta el final del cultivo, y que gracias a la firmeza de su piel no presentan problemas de rajado ni microcracking. Tienen, además, muy buena postcosecha.
Constelación comparte con Cosmostar sus resistencias al virus de la cuchara, spotted y buena tolerancia al rugoso.
Tucait, en pera
Con apenas dos años en el mercado, este tomate pera ya ha logrado consolidarse entre las variedades recomendadas por las principales comercializadoras de Almería, y es que cualidades no le faltan.
Tucait está indicado para ciclos cortos de cultivo y destaca por su “extraordinaria productividad y calidad de fruto”, afirma Fernández. Agronómicamente, su planta es fuerte y vigorosa, y está adaptada a distintos ciclos y condiciones de cultivo, bien sean plantaciones de otoño o primavera, en la zona de El Ejido o el Campo de Níjar.
Sus frutos son de calibre G (150-200 g), de bonito color rojo, intenso, firmes y sin problemas de microcracking ni rajado.
Cuenta, además, con resistencias al virus de la cuchara, spotted y tiene buena tolerancia frente al virus del rugoso.
El tomate que viene
A pesar esa tolerancia de los ramos Cosmostar y Constelación, así como de Tucait, en Harmoniz no quieren quedarse ahí y, de hecho, continúan trabajando en estas y otras tipologías con el objetivo de poner en el mercado nuevos materiales con resistencia al virus del rugoso.
Es más, “el año que viene tendremos más novedades”, concluye Fernández “y a ellos sumaremos en el corto plazo nuestra nueva gama de variedades con resistencia al rugoso (TT-1017; TT-1018; TT-1019 y TT-1021), que mantienen un bonito color rojo, similar a Cosmostar y Constelación, y minimizan aún más los síntomas del virus en el fruto”.