Los fruticultores germanos se enfriaron durante 2023 y dejaron de incrementar su superficie de frutos rojos. Los arándanos, frambuesas y grosellas descendieron durante 2023 en un 0,6 por ciento y alcanzaron las 9.290 hectáreas, según la Oficina Federal de Estadística.
La producción fue menor y descendió un 3,7 por ciento hasta las 41.400 toneladas.
Los arándanos son el cultivo más popular entre los fruticultores alemanes y ha ido aumentando desde el ejercicio 2012 y cerró 2023 con una superficie de 3.470 hectáreas, un incremento del dos por ciento con en comparación con 2022.
Los arándanos suponen el 37 por ciento de la superficie cultivada de berries -excepto fresas- y la cantidad cosechada fue de 15.300 toneladas, similar a los datos de 2022.
Las grosellas rojas y blancas sumaron más de 8.500 toneladas, lo que supuso un descenso del tres por ciento y le siguieron las frambuesas con 6.700 toneladas, casi un dos por ciento menos.
De toda la producción de berries en Alemania, unas 6.200 toneladas proceden de invernaderos tanto altos como bajos, lo que supone el 15 por ciento de la producción alemana.
Oferta bio
La oferta ecológica de berries alcanzó las 4.900 toneladas, lo que supone el 12 por ciento de la oferta total. La cantidad cosechada se elevó un ocho por ciento, mientras la superficie lo hizó en un 2,3 por ciento hasta alcanzar las 2.890 hectáreas.
