Los exportadores marroquíes esperan que la dinámica de precios actual del tomate en Europa se mantenga con su entrada para poder responder a las facturas de sus costes productivos.
La ola de calor de agosto y los problemas víricos en las plantas marcan sobremanera a todos los productores de Marruecos. Los exportadores, como Amine Maatoui de Comaprim, señalan que la transición hacia variedades resistentes al rugoso no está siendo fácil y hay retrasos de entrega de variedades de más de un mes.
La superficie de tomate ha disminuido un 10 por ciento en el caso de la firma Comaprim, según adelanta el portal agrimaroc.ma. Este descenso y el impacto del rugoso va a provocar que la caída de volumen de tomate sea de un 25 por ciento, según adelanta Maatoui de Comaprim.
Los productores de tomate de Marruecos han empezado a solicitar anticipos a los clientes para poder pagar las primeras facturas y mantener la actividad.
El ejecutivo Maatoui señala que «jugar con precios más altos no supone más márgenes comerciales, ya que tenemos que dar respuestas a las consecuencias del virus del rugoso, que están marcando la oferta de tomate en Marruecos».