Es la última encuesta realizada por el colectivo British Berry Growers, que representa al 95% de los productores de fresas en Reino Unido, y que apunta que el 80 por ciento de los productores de berry sienten que «ya no tienen una asociación ni un vínculo con los supermercados en el Reino Unido». Ha dejado de ser un matrimonio correcto.
La encuesta retrata la situación económica en el Reino Unido, ya que el 40 por ciento sostiene que los supermercados británicos sólo están interesados en comprar según el precio y olvidan el resto de valores e iniciativas.
Moral baja
La confianza en el futuro de los berries en el Reino Unido se encuentra en los niveles más bajos. El 68% de los productores han reducido sus inversiones y sus planes de crecimiento y tratan sólo de mantener la finca y la producción.
Tan sólo el 4 por ciento de los encuestados plantea realizar inversiones de futuro.
Los datos de costes de producción han subido un promedio de 18 peniques más para una canasta de 400 gramos de fresas y 21 peniques para una canasta de 200 gramos de frambuesa. El coste de los arándanos se ha elevado en 23 peniques para producir una canastilla de arándanos de 200 gramos y 21 peniques para una canastilla de moras de 200 gramos.
Pero el precio pagado por los supermercados británicos sólo aumentó en 4 peniques para las fresas y 11 peniques para las frambuesas. Y el precio de las cestas de moras descendió en 6 peniques y el de los arándanos en 13 peniques.
Este escenario de precios a la baja en moras y arándanos se contradice con el crecimiento de la demanda de berries en Reino Unido, anunciado por British Berry Growers.
La consultora Kantar Worldpanel expone que el crecimiento de las berries supera al resto de frutas frescas, ya que su valor de mercado creció un 7,8 por ciento y el volumen lo hizo en casi un uno por ciento.
No obstante, el colectivo de berries señala que este crecimiento es insostenible a largo plazo.
