La oferta de pera Rocha no superará las 100.000 toneladas durante la presente campaña 2023 por el impacto que ha tenido la sequía, agravada por los efectos climatológicos de la campaña anterior, donde la oferta se quedó en 123.000 toneladas.
Son los datos más bajos desde que existen registros y los productores están en fase de seleccionar la clientela. «Trabajaremos con los mercados de mayor valor añadido y no será este un año para abrir nuevos», expone Paulo Correia, comercial de Coopval, la empresa con mayor oferta de pera Rocha en el presente ejercicio.
Además de la sequía, «hubo un episodio de altas temperaturas a primeros de agosto, que condicionaron muchas piezas y huertos, y provocaron quemaduras en la piel», señalan desde la ANP.
Fue un episodio intenso tras un verano de temperaturas no extremas, lo que provocó que los frutales sufrieran más y provocó un 10 por ciento de pérdidas extras.
Las cadenas lusas no las tienen todas consigo y tras un periodo intenso de reuniones con los productores, se piensa en abrir la ventana a las importaciones españolas para cubrir la demanda habitual de la pera entre los consumidores portugueses.