La italiana Coop ha involucrado a 858 puntos de venta de sus franquiciados y cooperativistas para seguir la iniciativa de reducir en un 50 por ciento el precio de los alimentos frescos a punto de caducar.
El precio se bajaría en el mismo día y se comunicaría mediante una etiqueta como se realizan en otras cadenas europeas.
La cadena italiana ha aceptado la legislación UE que permite incluir la vida útil mínima en la etiqueta para nuevas categorías de alimentos.
Ya no se usará una fecha definitiva, sino orientativa, y gracias a este nuevo criterio se ha alargado la vida de algunos productos, permitiendo recuperarlos a los pocos días de su caducidad.
La cadena italiana señala desde su oficina de investigación que el 57 por ciento de los italianos declaró que había reducido cuidadosamente los residuos para hacer frente al aumento de los precios.
