Son las paradojas de la vida económica. El incremento de la facturación por parte de los transportistas autónomos para poder repercutir el incremento de los costes productivos ahoga a los transportistas por doble vía. La vía económica, ya que es un incremento de la factura falseado, ya que responde a la necesidad de poder responder al encarecimiento del gasóleo y de otros inputs; y ahora en lo fiscal.
En los últimos años, los profesionales autónomos se acogían al régimen de estimación objetiva (módulos), que ha permitido a más de 30.000 transportistas autónomos a acogerse a un régimen de tributación más favorable.
Este régimen se mantenía activo mientras que el volumen de rendimientos de un autónomo no superase los 125.000 euros.
Este rendimiento ha saltado por todos lados ya que «el incremento desorbitado de los costes de explotación producido durante 2022 ha variado la situación de años anteriores y ha ocasionado una situación paradójica de que miles de autónomos estén optando por no continuar prestando su actividad en lo que queda de año, a fin de evitar superar el límite fiscal para poder continuar acogido al régimen de módulos», señalan desde Fenadismer.
Los autónomos están a la espera de que el Gobierno de España prorrogue el régimen de módulos un año más.
Fenadismer ha solicitado a Hacienda qué concrete cuál va a ser su posición en relación a la prórroga o no del actual régimen de módulos, «por las consecuencias que esta indefinición ocasiona en un sector tan estratégico para la economía española como es el transporte por carretera».
