La producción hortícola de Suiza durante el verano de 2021 viene corta de efectivos por las lluvias protagonizadas en esta zona de producción durante la segunda quincena de julio.
«La disponibilidad de oferta desciende considerablemente y ya no se recuperará la producción, ya que se registraron fuertes lluvias durante cuatro semanas en varios cantones», señala la Confederación Suiza de Horticultores mediante un comunicado.
La situación actual de la producción de hortalizas en Suiza es «excepcional y las condiciones de producción son difíciles. El suelo está empapado y la tierra no tiene capacidad para absorber la lluvia tan rapidamente», señala el citado colectivo.
Esta situación climatológica afecta tanto a los cultivos al aire libre de brásicas, coliflores y hojas, como a los cultivos bajo invernadero, ya que las horas de luz se han reducido de manera drástica. «Los tomates, las berenjenas y los pepinos han crecido más lentamente, lo que significa que los volúmenes de cosecha son menores y la capacidad de postcosecha se reduce drásticamente», señala el colectivo suizo.
Los cantones de Zelanda y Vaud han sido los más afectados y las regiones ubicadas en el Este de Suiza.
El colectivo suizo de productores ya avisa de problemas en las plagas, con las malas hierbas y «la necesidad imperiosa de comenzar antes con las importaciones».
Los horticultores suizos esperan un impacto en el precio de las hortalizas suizas, porque los bienes son escasos y los costes de producción son más altos. «Es de esperar que los productos también se encarezcan en el punto de venta en el comercio minorista», señalan desde el colectivo.