El Congreso de Pepino, organizado ayer por la firma Rijk Zwaan en el Teatro de El Ejido, desveló los diferentes problemas que acompañan al pepino, pero sobre todo, dio a conocer la implantación de la CGMMV dentro del suelo.
Es por este motivo que el director técnico de Hortalan, Francisco Sola, desveló algunos detalles para convivir mejor con este virus en los futuros cultivos de pepino.
Y la primera recomendación pasa por solarizar el suelo durante 60 días como mínimo con un plástico de efecto antigoteo y no TIFF.
Otros de los consejos de Francisco Sola fue cambiar las líneas de plantación para no repetir el cultivo en el mismo espacio durante dos años y así minimizar el efecto del virus.
Retiradas
Además es importante retirar las plantaciones en fresco y no dejar que se sequen las hojas dentro del invernadero, «porque así se favorece la presencia del virus en el suelo», recordó Sola.
Y por supuesto, lo más importante es el uso de guantes y desinfectar los guantes y los cuchillos del corte del pepino a diario durante 20 minutos a temperatura sobre los 90 grados centígrados. De esta manera, «se minimiza mucho los problemas víricos en el interior del invernadero», apuntó Sola.
Pero lo más importante «para reducir la carga viral en el interior del invernadero es no repetir los cultivos de un año a otro con las cucurbitáneas», apuntó un Sola, que recomendó acudir a plantaciones de tomate.
El técnico de Hortalan recordó usar como mínimo 500 placas cromáticas por hectárea, aunque recordó que los horticultores neerlandeses llegan a usar 2.000 placas por hectárea para controlar los vectores que provocan la presencia del CGMMV.