La logística británica tiene problemas de profesionales. La empresa ParcelHero, especializada en entregras, ya advertía de la ausencia de profesionales que supiesen llevar vehículos pesados.
El motivo responde a las nuevas normas del Brexit para todos aquellos no británicos, lo que ha ido provocando el adios de ciudadanos de la Europa del Este, dedicados al negocio de la distribución y la construcción.
Ahora hay un déficit de hasta 70.000 conductores de vehículos pesados en el Reino Unido y no es sorprendente que los mayoristas de alimentos estén exigiendo que los conductores del ejército se pongan a disposición de los ciudadanos y las empresas.
El director del Market Inteligence de ParcelHero, David Jinks, apunta que «las entregas a domicilio de alimentos y bienes ya se están viendo afectadas por la escasez de conductores, y algunas tiendas también se están quedando sin existencias«.
El profesional señala que «pronto podríamos enfrentarnos a la escasez de bienes como cuando surgió el primer bloqueo».
El profesional señala que el Gobierno ya sabe de esta situación porque desde octubre miles de conductores y operarios de almacén de la UE están abandonando Reino Unido, ya que muchos ciudadanos no cumplen con los criterios propuestos por los certificados de trabajo.
La propia Tesco reconoce el problema y señala que «trabajamos duro para mantenernos al día y algunos mayoristas ya están haciendo repartos con sus medios para entregar a tiendas, pubs, escuelas y residencias», señala Ken Murphy, director de Tesco a la BBC en la mañana de hoy.
El problema es tal que la RHA -patronal británica del Transporte por Carretera- ha solicitado al Gobierno que suspenda temporalmente las restricciones de horas de trabajo de los conductores.