En respuesta a una pregunta en la Cámara Alta del senador navarro Francisco Javier Yanguas Fernández (Grupo Mixto), que pide el desarrollo de medidas legislativas para evitar el despilfarro de alimentos, García Tejerina ha asegurado que el Gobierno "trabaja en identificar qué normas pueden contribuir a reducir el volumen de desperdicios".
La Asamblea Nacional francesa debate actualmente una ley que obligaría a las empresas de más de 400 metros cuadrados a donar los excedentes que aún son consumibles a asociaciones caritativas, o bien a destinarlos a fabricación de comida animal o compost para la agricultura, y prevé multas y hasta penas de prisión en caso de incumplimiento.
García Tejerina ha subrayado que "anticipándose al Gobierno francés, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) ha promovido acuerdos de colaboración entre industrias, distribución y los bancos de alimentos" para mejorar el aprovechamiento de productos alimentarios que, "reuniendo todas las condiciones para su consumo, por diversas causas no entran en el circuito comercial".
"El desperdicio alimentario es una responsabilidad de todos", ha subrayado, y ha anunciado que, próximamente, el Magrama publicará "los resultados de un estudio pionero en la Unión Europea", basado en una encuesta a más de 500 hogares que declaran lo que desperdician por semana.
Según datos de la Comisión Europea, al año se desperdician 1.300 millones de toneladas de alimentos en el mundo, 89 en Europa y 7,7 en España, que es el séptimo país europeo que más comida en buen estado tira a la basura; los alimentos que se tiran en el planeta serían suficientes para alimentar a 2.000 millones de personas.
El consumidor es responsable de un 42 por ciento de este desperdicio, que se produce también en el proceso de fabricación de alimentos (39 por ciento), en la distribución (5 por ciento) y en la restauración (14 por ciento).
"La prevención y la reducción del desperdicio alimentario debe estar ligada al fomento de actuaciones que propicien un cambio real de actitudes, de hábitos, procedimientos de trabajo y sistema de gestión de dichos operadores", ha reiterado García Tejerina.
En 2013 el Magrama puso en marcha la estrategia "Más alimento, menos desperdicio", que busca dar información sobre el problema, sensibilizar y establecer buenas prácticas, la colaboración con otros agentes y el desarrollo de otras tecnologías que ayuden a minimizar el problema, entre otros aspectos.
Precisamente, esta semana se celebra la "Semana de la Reducción de Desperdicios", con iniciativas en supermercados, restaurantes y escuelas en Madrid, Córdoba, Teruel, Cuenca y Tarragona.
