Ha incidido en que ahora es más importante que hace dos años la internacionalización de las empresas, porque hay muchas que han cubierto un gran recorrido en los mercados exteriores y ahora creen que pueden "pisar el freno o el acelerador porque ven que la demanda interna en España se recupera y que no pasa nada por perder cuota en el mercado internacional".
"Esto es un riesgo que no nos podemos permitir y hay que evitarlo" porque precisamente eso fue lo que "mató a la economía española" en las anteriores etapas de crisis, ha advertido García-Legaz.
No obstante, ha sostenido que la situación actual es diferente y "se ha aprendido de esta crisis", de forma que las empresas saben que los mercados exteriores tienen que formar parte de sus estructuras de ventas.
Ha destacado que es difícil encontrar a una empresa internacionalizada en 2007 que haya caído durante esta crisis y ha subrayado que en general han mejorado sus resultados, son más resistentes a los ciclos y más productivas.
Desde 2007 a 2014, las empresas exportadoras españolas se han incrementado más de un 50 por ciento hasta rondar 150.000, aunque el número ha bajado en unas 2.000 respecto a 2012, lo que ha atribuido en parte al repliegue al mercado español.
A pesar de este leve descenso, el secretario de Estado de Comercio ha resaltado que las empresas que exportan regularmente han crecido entre el 10 y el 12 por ciento en los últimos 3 o 4 años.
Comportamiento empresarial
Este buen comportamiento del sector exterior se ha reflejado en el PIB, en el que representa en torno al 33 ó 34 por ciento, diez puntos más que antes de la crisis, si bien García-Legaz ha sostenido que hay que aspirar al modelo de Alemania, donde supone más del 50 por ciento.
Para ello, es necesario que las empresas ganen tamaño y contar con una "clase media empresarial internacionalizada", lo que, a su juicio, está vinculado a un cambio en la cultura de la empresa española que pasa por tener "más ambición".
Preguntado por Andalucía, García-Legaz ha resaltado los positivos datos del sector exportador andaluz en los últimos años al haberse convertido en la tercera región exportadora de España, aunque también necesita de una "clase media de empresas con músculo de exportación", al tiempo que ha subrayado la fortaleza de los sectores agroalimentario, aeronáutico y de energías renovables.
Además, ha puesto en valor que el sector exportador andaluz ha reducido su dependencia de la Unión Europea en mayor medida que España. También se ha referido al buen funcionamiento de la red de oficinas en el exterior que comparten el ICEX -dependiente del Ministerio- y la Agencia de Promoción-Extenda, adscrita a la Junta de Andalucía.