Fuentes de la federación hortofrutícola Fepex han explicado que en esta etapa final, el grupo operativo trabaja en la validación de sensores para la monitorización de distintas variables, como los indicadores visuales de etileno y de CO2 en cereza y albaricoque y su correlación con la calidad del fruto.
En concreto, en Frutaria se miden las condiciones ambientales a las cuales la fruta es expuesta durante su proceso de recolección, así como los efectos de la vibración y los golpes en la merma de calidad y la aparición de manchas.
Las entidades encargadas de dicha evaluación han sido el Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (Itene) y la Fundación Parque Científico Tecnológico Fundación Aula Dei (PCTD).
En un comunicado, han destacado que también se ha procedido a la monitorización con sensores de otras variables ambientales -temperatura, humedad y etileno- y de transporte -vibraciones y choques- con la colaboración de la empresa leridana Baró e Hijos para conseguir reducciones de las pérdidas y costes en fruta.
Tics4fruit, constituido en diciembre de 2019, cuenta con la financiación del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación (MAPA) a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader).
Además de Itene, PCDT y Fepex, en el grupo operativo participan la Universidad de Zaragoza, la empresa Geezar y Mercasa.
