Un equipo de académicos ha creado una mezcla con banana, judías, setas y leche, y ha utilizado una impresora 3D para convertirlo en un snack en forma de pulpo, ha informado el diario Independent.
Carla Severini, autora principal de esta investigación, ha señalado que los resultados, publicados en la revista Food Engineering, son una marca hacia donde se dirige el futuro, ya que algunos expertos piensan que la impresión de alimentos 3D podría convertirse en una norma en restaurantes, escuelas y hogares.
Están trabajando con otros alimentos, como el pescado o la coliflor, ya que son dos productos que no tienen una aceptación excesiva entre los más pequeños.