Según ha explicado la compañía en un comunicado, esta iniciativa supone proporcionar a sus más de 150 jefes de venta un iPad de última generación para el desarrollo de sus tareas. La aplicación diseñada para esta compañía permitirá a la red de ventas disponer en tiempo real de indicaciones y datos esenciales para la gestión de una tienda de forma rápida, sencilla y segura. Además, se simplifican los procesos y se reducen los tiempos de reacción, facilitando la toma de decisiones, ha detallado.
Ha resaltado, que los primeros resultados de la implantación de este proyecto han permitido a la empresa aumentar notablemente la productividad de sus equipos de venta. Según el consejero de Lidl, Alexander Hess, la herramienta ha permitido "eliminar tareas administrativas de escaso valor añadido y que permite al jefe de ventas disponer de mayor tiempo para dedicarse a las tareas realmente importantes". La implantación de este sistema ha supuesto, además, reducir de forma notable el uso de papel en la gestión diaria de los establecimientos, por lo que se reduce significativamente el impacto medioambiental.
