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Jornaleros contratados en origen para la fresa caen a 2.120 en última campaña

Los trabajadores contratados en origen en la última campaña fresera, concluida el pasado mes de mayo, alcanzaron los 2.120, lo que supone el 2,16 por ciento del total de jornaleros empleados, que ascienden a más de 60.000.

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Así lo ha destacado el subdelegado del Gobierno en Huelva, Enrique Pérez Viguera, quien ha presidido la Comisión Provincial de Seguimiento del Convenio para la Ordenación, Coordinación e Integración Sociolaboral de los Flujos Migratorios en Campaña Agrícola de Temporada.

Los contratados en origen son temporeras procedentes de Marruecos, repetidoras de más de dos años y que han cumplido el compromiso de retornar a su país de origen, lo que les convierte en mano de obra fidelizada y especializada para 237 empresas del sector.

Esta cifra dista mucho de los 30.000 contratos en origen que el sector fresero confiaba en fidelizar en 2009 para hacer frente a las necesidades de mano de obra de la campaña y que se cubrían fundamentalmente con procedentes de Europa del Este.

En este descenso ha tenido mucho que ver la situación de crisis económica en España y el aumento del desempleo que ha motivado que en los últimos años se haya priorizado la mano de obra local.

Algo que se mantendrá este año, pues Pérez Viguera ha pedido al sector agrícola onubense "una apuesta total por los trabajadores locales, como así lo ha hecho el Gobierno de España al decidir que en 2015 no hubiese contingente de mano de obra extranjera con el único objetivo de favorecer la contratación de trabajadores locales".

Respecto a la próxima fase de plantación, la comisión de flujos migratorios ha dado luz verde a la propuesta del subdelegado del Gobierno de no autorizar ningún contrato en origen.

De esta forma, la siembra se llevará a cabo exclusivamente por mano de obra local, ya sean trabajadores nacionales o extranjeros con su situación regularizada en el país.

Éste será el quinto año consecutivo que se lleva a cabo esta medida, después de que en 2010, se permitiera la contratación en origen de 972 jornaleros marroquíes, de los cuales finalmente se emplearon a 860 para las labores de plantación, tareas que se desarrollan normalmente entre los meses de octubre y noviembre y que da empleo a miles de trabajadores del campo.