Llonch sobreoferta tomate
Internacional

F. Llonch: «Esperamos una sobreoferta de tomate en 8 meses»

La vuelta del precio del gas a tiempo de antes del conflicto bélico es uno de los argumentos que provocará un incremento de la oferta de tomate a primeros de 2024.

El precio del gas vuelve a cotizaciones de antes del conflicto bélico y se sitúa justo a la mitad de cuando empezó la guerra Rusia-Ucrania. Es un motivo más que ilustrativo para que los productores de Países Bajos retomen sus programas de tomate en los meses de invierno en condiciones de calefacción.

También la superficie de tomate en Almería se va a incrementar para la campaña que viene, ya que son varios los productores que han decidido ampliar sus hectáreas aprovechando los buenos precios de las dos últimas campañas. Aún no se han hecho públicos los datos superficiales de tomate en Almería, pero sí las cotizaciones en las que los productores han salido satisfechos.

Países Bajos

«Los horticultores neerlandeses van a alargar su campaña de tomate en el presente ejercicio, ya que se han visto obligados a retrasar su inicio de trasplante, y tratarán de aprovechar al máximo su presencia en los mercados internacionales», apunta Françesc Llonch, director comercial de Kopfsalat Trade.

Además del alargamiento de la campaña de tomate por parte de los productores holandeses, se suma que los productores de los Países Bajos volverán a sus fechas de invierno en condiciones de calefacción, ya que «los precios del gas son ahora especialmente competitivos y es una motivación para retomar la campaña de invierno», apunta Llonch.

Es un caldo de cultivo ideal para que, en un periodo de «ocho meses, tengamos una sobreoferta de tomate en toda la Unión Europea y se multipliquen los problemas de rentabilidad en el cultivo del tomate», señala Llonch.

Ante esta situación, el director de Kopfsalat Trade vaticina un primer trimestre de 2024 especialmente complejo en las liquidaciones de tomate en todos los mercados UE. «La primavera de 2024 no será fácil para esta categoría en toda Europa», concluye Françesc Llonch.