Hogan también ha señalado que el presupuesto destinado a la promoción de los sectores comunitarios de frutas y hortalizas se triplicará, al pasar de 61 a 200 millones de euros.
Rusia aplica a estos productos europeos un veto desde hace más de un año, como represalia a la decisión de la Unión Europea de imponer sanciones económicas a Moscú por su papel en la crisis separatista en el este de Ucrania.