España cultivó 79.269 hectáreas de organismos genéticamente modificados (OGM) en 2008, lo que le ha convertido en el décimo cuarto productor mundial de transgénicos, según señala el último informe de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio), presentado hoy en Madrid.
El informe recuerda que Estados Unidos es el principal productor mundial de OGM, con 62,5 millones de hectáreas, seguido de Argentina (21 millones), Brasil (15,8 millones), India (7,6 millones), Canadá (7,6 millones) y China (3,8 millones).
A continuación se sitúan Paraguay (2,7 millones de hectáreas), Sudáfrica (1,8 millones), Uruguay (700.000 hectáreas) y Bolivia (600.000 hectáreas), así como Filipinas (400.000 hectáreas), Australia (200.000 hectáreas) y México (100.000 hectáreas).
La lista de los 25 países productores de transgénicos la completan, con una producción inferior a las 100.000 hectáreas, Chile, Colombia, Honduras y Brurkina Faso, seguidas de República Checa, Rumanía, Portugal, Alemania, Polonia, Eslovaquia y Egipto.
Asimismo, el texto de Asebio reitera que España es el primer productor europeo de OGM y que también ocupa la primera posición en cuanto a importación de granos para alimento del ganado.
Según el informe, más de 10.000 agricultores cultivan maíz transgénico, el único OGM que se siembra en España, y más de 300.000 ganaderos utilizan esta variedad como alimento de su ganado.
Añade que productores de semillas, fabricantes de piensos, consumidores y el propio medio ambiente también aprovechan las «ventajas» de estos productos, ya que su uso reduce la utilización de insecticidas y combustibles.