Por el alto número de muestras analizadas, el trabajo publicado en la revista Molecular Ecology permite, según apuntan los científicos, tener una visión muy completa de la diversidad genética de la especie.
Los investigadores han empleado marcadores moleculares de ADN y sistemas de información geográfica, de forma que todos los árboles estudiados están localizados, lo que posibilita un análisis de la diversidad genética de los ejemplares en función del origen geográfico de las muestras.
El investigador de La Mayora Iñaki Hormaza ha explicado que los resultados obtenidos evidencian un movimiento de material vegetal de esta especie en tiempos precolombinos desde América Central a América del Sur. Según Hormaza, el cultivo se desarrolló posteriormente con más intensidad en América del Sur, lo que llevó a pensar que el lugar de origen y diversificación se encontraba en esa región.