Todos los productores, tanto profesionales como de autoconsumo, que siembren o tengan sembrada patata en los concejos afectados -San Tirso de Abres, Vegadeo, Castropol, Taramundi, Navia, Valdés y Cudillero- deberán comunicar el cultivo.
Además de desaconsejar la siembra e imponer la obligación de comunicar el cultivo en estos concejos, los productores deberán eliminar mediante un arado todos los tubérculos que puedan quedar de la anterior campaña y no se podrá reutilizar como semilla los tubérculos recolectados con anterioridad.
Así, cualquier siembra deberá utilizar semilla certificada y con garantía sanitaria, así como trampas de feromona sexual que será suministrada por la administración.
Los productores también estarán obligados a realizar tratamientos fitosanitarios preventivos y colocar las semillas de la siembra a una profundidad mínima de quince centímetros para evitar el contacto con las larvas.