La fuerte subida en valor, siempre respeto a la primera semana de enero, se ha registrado también en las producciones de invernadero, con incrementos de precio del 36 por ciento en calabacín, 17 por ciento en tomate, 20 por ciento para pimiento y 13 por ciento para berenjena.
La tendencia de aumento se recoge sobre los datos recabados a partir del Ismea. A su vez, el mercado está marcado por una fuerte carencia de oferta y un descenso de las importaciones, principalmente productos con origen España, donde los acontecimientos climáticos por bajas temperaturas han causado cuantiosos daños a los cultivos.
Las contribuciones del norte de África, principalmente procedentes de Marruecos, no son suficientes para compensar el actual desequilibrio y falta de suministro del mercado italiano.
La situación comienza a preocupar a los fruticultores del sur de Italia, ya que las repercusiones climáticas podrían condicionar de forma significativa el rendimiento de producción. Situación que también repercute al norte de Italia ante la falta de suministro.