Así lo ha señalado la consejera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, después de presentar el informe completo de la previsión del aforo citrícola para la campaña actual a los representantes de sector agroalimentario.
Según informa la Generalitat, en esta campaña, en la que la disponibilidad de agua por parte del cultivo será determinante en el calibre de la fruta, se espera una mayor cosecha que la campaña pasada, 755.058 toneladas de cítricos más, lo que significa una recuperación de la producción.
Este año la floración ha sido normal, lejos del episodio generalizado de altas temperaturas que marcó la cosecha pasada, pero la ausencia de lluvias y el mayor espaciado entre riegos en algunas zonas ha hecho necesario realizar diversos "aclareos" para ayudar al engorde de la fruta en el árbol.
Se prevé un aumento de la producción en la mayoría de las variedades, con 1.850.478 toneladas de naranjas (un 19 por ciento más), 1.792.407 de mandarinas (un 29,4 por ciento más) y 288.080 de limones (un 21 por ciento más), pese al ligero descenso de la superficie adscrita al cultivo de cítricos, especialmente a la provincia de Valencia.
En las provincias de Castellón y Alicante prácticamente se ha mantenido, si bien la Generalitat destaca el aumento en Alicante de la superficie dedicada al limón.
Cebrián ha afirmado que desde la Conselleria se seguirá defendiendo la citricultura valenciana y exigirán en el Ministerio de Agricultura que la defienda también ante las concesiones comerciales de la Unión Europea a Suráfrica.
"Continuamos siendo líderes en producción y comercialización citrícola", ha valorado la consellera, quien respecto al trabajo realizado para poder ofrecer estas previsiones en el inicio de campaña ha subrayado "el esfuerzo de transparencia y el rigor técnico desplegado por esta Administración".