Hasta ahora, los productores de la V, VII y VIII región han adquirido alrededor de 100.000 plantas, según Sergio Maureira, gerente general del CTF. «Las variedades están obteniendo excelentes resultados y los pedidos para la próxima temporada alcanzan las 300.000 plantas», dijo Maureira.
Algunas empresas dedicadas al cultivo de esta fruta pretenden aumentar la superficie de producción de cara a la próxima campaña. De hecho, algunas compañías tenían previsto importar producto desde Estados Unidos, pero han decidido apostar por el cultivo de estas nuevas variedades, señala fruitnet.com.
Santa Catalina y Santa Clara son variedades de alto rendimiento al inicio de la campaña y pueden duplicar su rendimiento en el primer año de siembra además de contar con un nivel de grados Brix elevado.
Santa Teresa es también de elevado pero produce un fruto de mayor calibre aunque con un nivel ligeramente inferior de grados brix. Las variedades también se están implantando en Europa a raíz de un acuerdo firmado entre la CTF y el productor-exportador de berries Masiá Ciscar para desarrollar las variedades de frambuesa en la Península Ibérica.