Internacional

Comisión PE exige controles anuales en cultivos orgánicos para evitar fraudes

La Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo (PE) ha exigido que todas las explotaciones dedicadas a cultivos orgánicos sean objeto de al menos un control anual para prevenir los casos de fraude.

La Comisión de Agricultura hizo hincapié en que la agricultura ecológica "necesita un régimen de controles a medida a lo largo de toda la cadena de aprovisionamiento", con el fin de impedir los fraudes alimentarios, según un comunicado del PE.

Aunque los eurodiputados apoyaron la idea de la Comisión Europea de basar los controles en el riesgo, insistieron en la necesidad de mantener como mínimo un control físico anual sobre el terreno en todas las explotaciones ecológicas.

El Consejo, que ya dio luz verde a la revisión de la normativa el pasado junio, pidió por su parte que en principio los controles tengan lugar cada año sobre el terreno, pero que se puedan espaciar hasta los tres años en aquellas explotaciones para las que las evaluaciones de riesgo concluyan que no es necesaria una mayor frecuencia.

Por otro lado, los eurodiputados subrayaron que los países deberán garantizar la trazabilidad en todas las etapas de la producción para asegurar a los consumidores que los productos orgánicos que compran cumplen de verdad esos criterios.

Con ello se pretende reforzar la confianza en la etiqueta bio europea, dijo hoy la comisión de Agricultura de la Eurocámara.

Los diputados propusieron también medidas para evitar la contaminación de los productos biológicos, en particular en las explotaciones mixtas (que combinan cultivos convencionales y biológicos), y adoptaron un plan para ayudar a los pequeños agricultores a convertirse a la agricultura ecológica.

Además, apoyaron la propuesta de la CE de garantizar que todos los productos importados respetan las estrictas disposiciones europeas.

En ese contexto, respaldaron que las reglas de equivalencia en vigor, que obligan a los terceros países a respetar normas similares pero no idénticas a las vigentes en la Unión, desaparezcan de manera progresiva en los cinco próximos años.

No obstante, para impedir posibles problemas de aprovisionamiento en el mercado de la UE, defendieron que la CE pueda, durante un periodo máximo de dos años, ajustar las exigencias de la importación para ciertos productos que no respetan totalmente las normas europeas.

El ponente del informe votado hoy, el alemán Martin Hausling, de los Verdes, indicó que el sistema previsto en la normativa "solo será realmente eficaz en la práctica si todos los operadores implicados adoptan la responsabilidad de hacer funcionar mejor la agricultura ecológica".

Hausling liderará la negociación del PE con el Consejo para la formulación final de la nueva legislación.