Así se recoge en el último informe de cítricos del Observatorio de Mercados y Precios de la Junta de Andalucía, consultado por Efe, que sitúa el valor medio de este producto en enero en cifras que no superan los 0,11 euros por kilo para las navelinas.
Se están dando, según las empresas del sector, "una falta total de interés por parte de los compradores por las naranjas navelinas que aún permanecen en los árboles", una situación que ha llevado a muchas de las manipuladoras a tomar la alternativa de enviar esta variedad a la industria de transformación.
Por lo que respecta a las naranjas salustianas están encontrando similar dificultad para sus ventas que las navelinas, y las que se venden no superan los 0,13 euros el kilo.
Estos precios vienen motivados por el nivel de consumo, ya que, en la actualidad no se demandan las variedades que se están comercializando como en años anteriores, si bien los productores confían en una reactivación del mismo.
Frente a estas variedades se percibe un aumento de las ventas de naranjas del grupo Navelate-Lanelate, aunque a ritmos de compra bastante inferiores a lo habitual a estas alturas de la campaña.
Por lo que respecta a las mandarinas, progresivamente aumenta la oferta de variedades por parte de los agricultores y, a estas alturas de la campaña, ya es posible encontrar algunas como Nova, Ellendale, Ortanique, Afourer y Tango, así como partidas de clementinas del grupo de las tardías, como es la Hernandina.
Los ritmos de compras han experimentado un cierto descenso, aunque se mantienen en valores económicos de rentabilidad para los productores, debido precisamente a esa confluencia de variedades en los mercados que ha derivado en una disminución de las peticiones de fruta.