La británica Morrisons ha desarrollado en la ciudad inglesa de Preston un modelo de tienda diferente, que le servirá como prueba piloto para conocer como reacciona el consumidor. La tienda se caracteriza por tener animación y un diseño más atractivo y aprovechar en las secciones más importantes unos perfiles más dinámicos y amenos.
Los responsables de Morrisons no hacen valoración, sino que simplemente esperan ver como reacciona el consumidor durante el periodo de ventas navideñas.
Han aprovechado el tirón de la Navidad para montar este perfil de tiendas más apropiadas al fomento del consumo.