Villafranca resalta, en una entrevista concedida a Efeagro, que el año se ha caracterizado por menos producciones y menos facturación, por lo que la "percepción" es que el agricultor ha reducido sus ingresos respecto a 2013.
La disminución de cosechas por problemas como la sequía en el sureste español, en sectores como almendro o cereal, se ha unido a que los precios "no han podido remontar" a causa de la crisis, según el responsable de Cooperativas Agroalimentarias.
Entre los "capítulos más importantes", Villafranca cita el veto que impuso Rusia a las exportaciones agroalimentarias en agosto, que provocó que "lo hayan pasado mal las cooperativas y toda la industria hortofrutícola".
A su juicio, el veto "puso en evidencia las carencias" de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), porque "no ha dado herramientas directas" para combatir problemas de mercado y "hubo que improvisar".
"La gestión desde el Ministerio (de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) y desde las organizaciones fue buena; se actuó rápido, pero eso no quiere decir que no haya incidencia; la hay e importante", asegura.
La mayor parte de la crisis, recuerda, las sufrieron los productos comercializados entre agosto y octubre, cuando hubo que forzar retirada de productos, pero ahora el problema se puede agravar, porque comienzan campañas hortícolas "y si sigue" (el veto) no van a poder contar con ese mercado.
No obstante, detalla que algunos productos, como el cerdo, han encontrado mercados alternativos, si bien en este caso ya sufrían restricciones en su acceso a Rusia antes de agosto.
Villafranca insiste en que los agricultores se vieron "salpicados" por un conflicto político "sin ser responsables".
Por otro lado, alude a la nueva PAC, cuyo resultado definitivo no conocerá el agricultor español hasta final de año y sobre la que, además, a última hora han aparecido "incertidumbres", en referencia a los borradores del Real Decreto que aprobará el Gobierno en breve.
Respecto a la PAC, las cooperativas creen que "se ha hablado mucho de ayudas directas", pero se debería haber aprovechado su reforma para impulsar medidas "valientes" de mercado; sin embargo, en la Unión Europea (UE) y en España "somos víctimas de nuestro reparto político, donde cada autonomía tiene que tener su cuota de presupuesto".