La superficie hortofrutícola total de Almería, que asciende a algo más de 57.600 hectáreas, ha tenido un ligero descenso de 128 hectáreas (0,2 por ciento), mientras que la extensión de invernaderos creció un uno por ciento) y supera las 30.600 hectáreas. Las superficies de cultivos que más han crecido son las dedicadas a pimiento (9 por ciento), calabacín y sandía (4 por ciento ambos), y las que más han disminuido, las de judía verde (23 por ciento) y melón (10 por ciento).
Respecto a las exportaciones hortofrutícolas, se ha registrado un comportamiento similar a la campaña anterior, con un ligero descenso en volumen (2,3 por ciento) e incrementos en el valor de las ventas (17,6 por ciento). Así, entre septiembre de 2015 y mayo de 2016 estas transacciones reportaron 1.992 millones mientras que en los mismos meses de esta campaña han alcanzado los 2.343 millones relativos a 2,1 millones de toneladas.
La berenjena destaca como el producto con más incremento en el valor en origen, que casi se ha duplicado (93,7 por ciento) hasta alcanzar los 133 millones 2016-2017, y es, además, la hortaliza cuyo precio de mercado más se ha elevado (113 por ciento) hasta los 79 céntimos por kilogramo.




















