Según ha informado la UPV en un comunicado, en el cultivo de cítricos, la poda manual es uno de los procesos que más gastos genera al agricultor.
Se estima que para podar una hectárea, son necesarias cerca de 100 horas de trabajo, lo que se traduce, en término medio, en un coste de 900 euros.
Los investigadores han analizado los posibles beneficios de incorporar al proceso de cultivo de mandarina Fortune la poda mecánica, una práctica común en países como Estados Unidos, Brasil o Australia, pero todavía poco extendida en España.
Los investigadores valencianos y murcianos evaluaron el rendimiento y la calidad de la fruta durante tres campañas, aplicando diferentes tipos de poda: sólo manual y dos intensidades de mecánica con repaso manual.
Se demostró que la combinación de poda mecánica con repaso manual puede reducir el tiempo de poda en un 13 por ciento sin que los podadores hubieran sido entrenados para combinar ambas prácticas.
Así, el estudio concluye que una mayor práctica permitiría realizar una poda manual más rápida cuando los operarios repasan la prepoda mecánica, con la consiguiente reducción del tiempo empleado.
Asimismo, el empleo de la prepoda mecánica permite controlar con mayor precisión el tamaño de los árboles y el ancho de las calles, lo que facilita otras labores como los tratamientos fitosanitarios.
La investigación fue financiada por la Consejería de Agricultura y Agua de la Región de Murcia y en 2013, recibió el primer premio a la mejor comunicación en el apartado de "Recolección mecánica en fruticultura" en el "VII Congreso Ibérico de Agroingeniería y de Ciencias Hortícolas", celebrado en 2013.
Ahora, estas conclusiones han sido publicadas en el Spanish Journal of Agricultural Research.