Esa suma engloba un legado de obligaciones financieras conjuntas entre los países comunitarios que se remontan a hace décadas y contempla gastos en concepto de pensiones, contratos plurianuales o compromisos para financiar proyectos de infraestructuras que, según indica el periódico, Bruselas insistirá en que Londres debe cumplir.
El análisis considera que el presupuesto compartido europeo se presenta ahora como uno de los principales obstáculos para materializar el "brexit".
La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, ha indicado que tiene previsto activar el Artículo 50 del Tratado de Lisboa, requisito necesario para comenzar el proceso formal de dos años de negociaciones con Bruselas, antes de que termine marzo de 2017.
Según esto, los 20.000 millones de euros en los que se cifra el coste total del "brexit" para este país cubren la parte británica de las obligaciones del Reino Unido con la UE, como las asignaciones presupuestarias no pagadas por valor total de 241.000 millones de euros.
En esa cifra también se incluye la parte correspondiente al Reino Unido del total de 63.800 millones de euros en concepto de pensiones y responsabilidades contractuales futuras y otros compromisos de gasto de los estados miembros, por valor de unos 32.000 millones de euros.
El diario anticipa que probablemente los diputados euroescépticos reaccionarán mal al hecho de que los contribuyentes británicos tengan que abonar miles de millones de libras a Europa como precio del "brexit".
El análisis del FT es el primer intento de cuantificar en su totalidad el costo derivado de las responsabilidades del Reino Unido en el presupuesto comunitario.
Los 20.000 millones de euros cubrirían solamente el gasto que ya ha sido aprobado en proyectos comunitarios.