Turquía se convertirá en esta campaña 2023-2024 en líder en la producción de cítricos del hemisferio norte con una cosecha de unos 6,5 millones de toneladas, que podría ser incluso mayor y superar los 7 millones de toneladas si la climatología y la alternancia juegan a su favor.
Este es uno de los datos más significativos de las previsiones de cosecha de cítricos del hemisferio norte hechas públicas este viernes por la Organización Mundial de Cítricos (WCO, por sus siglas en inglés), y que fueron avanzadas a los principales operadores del sector durante la celebración, el pasado miércoles, de la conferencia Global Citrus Outlook.
Turquía se sitúa, de este modo, por encima, incluso, de España, cuya cosecha alcanzará en el nuevo ejercicio los 5,9 millones de toneladas, según la WCO; una cifra prácticamente en línea con temporadas anteriores (+2 %).
Recuperando potencial
En total, el hemisferio norte recuperará este año su potencial productivo, tras un ejercicio 2022-2023 marcado por una cosecha excepcionalmente baja, en torno a los 25 millones de toneladas.
En 2023-2024, las previsiones de la WCO apuntan a un incremento del 12,2 % con respecto al ejercicio pasado, hasta las 28.976.001 toneladas. Esta cifra supone, además, un casi un 1,5 % más que la media de las últimas cinco campañas.
Estas previsiones están basadas en los datos aportados por Egipto, Grecia, Israel, Italia, Marruecos, España, Túnez, Turquía y Estados Unidos.
Asimismo, y con respecto al comercio mundial de cítricos, las estimaciones de la WCO apuntan a unas exportaciones totales en torno a los 9,48 millones de toneladas, un 11,4 % más que hace un año y un 4,5 % más que la media de los últimos cuatro ejercicios.
Philippe Binard, secretario general de la WCO, afirmó durante la conferencia que “los datos de mercado que recibimos apuntan a una recuperación”, tras una cosecha extremadamente baja en 2022-23. Y explicó que este crecimiento se debe, sobre todo, al impulso de “Turquía y Egipto, mientras que otros países se mantienen estables o, como mucho, con aumentos poco significativos”.
Por su parte, Eric Imbert, del CIRAD, añadió que, “si bien el pronóstico de este año muestra una recuperación con condiciones variables en los países productores y las categorías de cítricos, se deben tener en cuenta muchos parámetros para el análisis de mercado”.
En este sentido, comentó que “las cuestiones climáticas, como las heladas tardías, la sequía, las olas de calor o las nuevas plagas y enfermedades, influyen en la calidad, la coloración o la fecha de cosecha de la producción”.
Asimismo, “el mercado seguirá viéndose afectado por la inestabilidad geopolítica, mientras que la demanda de los consumidores está bajo presión debido a la limitación del poder adquisitivo y la inflación”.
Por países
Según las estimaciones de la WCO, la producción de cítricos de España, con 5,9 millones de toneladas, será un 2 % superior a la de temporadas anteriores, debido al descenso de las naranjas (-6 %) y el aumento de los limones.
Italia, por su parte, incrementará sus volúmenes un 6 % hasta los 2,6 millones de toneladas, con más naranjas (+20 %), pero menos mandarinas y limones (-10 % cada uno). Mientras que Grecia caerá un 7 %, hasta 1,1 millones de toneladas.
En los demás países mediterráneos, Turquía es ahora el líder del mercado con una primera estimación de producción de 6,5 millones de toneladas (+45 %), con un fuerte crecimiento en todas las categorías.
La previsión de producción turca podría incluso superar los 7 millones de toneladas, gracias al aumento de la superficie y la productividad, así como la alternancia y las condiciones climáticas favorables.
Egipto, por su parte, con 5,4 millones de toneladas, crece un 10 % con respecto a la temporada anterior y un 15 % en relación a la media de los últimos 4 años. Su principal categoría son las naranjas, con 3,7 millones de toneladas (+5 %), mientras que el crecimiento de dos dígitos de las mandarinas debería suponer una producción de 1,3 millones de toneladas.
Continuando con las producciones mediterráneas, Marruecos prevé una recuperación parcial de su producción, hasta los 2 millones de toneladas, en torno a un millón de toneladas de mandarinas (+11%) y 930.000 de naranjas.
La producción de Israel se estima en 365.000 toneladas, pero el reciente conflicto y ataque al país es una fuente de múltiples desafíos en cuanto a suministro, logística y recursos humanos para la cosecha y el envasado. Mientras que, en Estados Unidos, aumentará un 1 %, hasta los 4,5 millones de toneladas, con más naranjas (+10 % a 2,4 millones de toneladas), pero menos mandarinas (-2 % a 856.000 toneladas), y aún menos para el limón (-12 % a 889.000 toneladas).