García Tejerina ha visitado el Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela (Alicante), junto al president de la Generalitat, Alberto Fabra;, el conseller de Agricultura, José Císcar; la presidenta de la Diputación de Alicante, Luisa Pastor, y el alcalde de la ciudad, Monserrate Guillén, entre otros.
La ministra ha recordado que el Gobierno trabaja desde haces tres años y medio en la solución a los problemas de gestión del agua desde la "más absoluta seriedad, rigor e involucración de las partes implicadas", aunque ha reconocido las dificultades normativas, técnicas, legales y financieras que existen.
De hecho, ha recordado que el Gobierno del PP ha dado pasos "muy importantes" en materia de agua, puesto que, en la actualidad, ya se han aprobado todos los planes hidrológicos de cuenca, cuyas necesidades y disponibilidades no se habían analizado "desde 1998", entre ellos los dos últimos, los de las cuencas del Segura y del Júcar.
"Esto será el punto de partida para un pacto nacional del agua", ha dicho la ministra, quien preguntada en relación con el trasvase del Ebro ha querido dejar claro que antes se debe culminar el segundo ciclo del agua, ya que "no se puede hablar de interrelacionar cuencas si no se han definido las necesidades de cada una".
En cuanto al trasvase del Tajo-Segura, García Tejerina ha expuesto que, gracias al Memorándum, se le ha dado "seguridad jurídica y garantía de abastecimiento a la cuenca cedente y tranquilidad a quienes se abastecen de este trasvase".
En este sentido, ha recordado que el Ejecutivo central ha aprobado hoy 50 millones de euros extraordinarios para las cuencas del Júcar y del Segura, que se "suman a los decretos de sequía" de la semana pasada.
García Tejerina ha reconocido, asimismo, la "importancia" que la agricultura tiene para un país "exportador" como España, puesto que "equilibra la balanza comercial y contribuye a sanear sus cuentas", y también del "agua", porque sin este recurso, "no hay producciones, cultivos, ni ganadería".
Por su parte, Fabra ha avanzado que el Consell impulsará el reconocimiento del Juzgado Privativo de Aguas Orihuela y Pueblos de su Marco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
"Este juzgado milenario es el fiel reflejo de la importancia que tiene la agricultura en nuestra economía y de la labor realizada, durante siglos, que demuestra el esfuerzo de los agricultores", ha dicho Fabra, quien ha añadido que buscan reconocer "todo el esfuerzo realizado por la entidad y todo su patrimonio cultural e histórico".
Fabra ha subrayado el trabajo desarrollado por la entidad durante más de siete siglos, "un esfuerzo y una tenacidad que se ven reflejados en la espectacular transformación que hoy podemos admirar en la Vega Baja, convirtiéndose en uno de los pilares del progreso de la Comunitat por la ejemplar gestión y defensa del agua".
Ha resaltado que, gracias a esta entidad, hoy la Vega Baja disfruta de un entorno mucho más competitivo y eficiente del que se benefician los agricultores alicantinos, al tiempo que ha reclamado que España recupere una política de Estado que permita "el uso racional y solidario del agua".
El jefe del Consell ha explicado que la Comunitat lidera la reutilización de agua para regadío en España, con más de 300 hectómetros cúbicos al año, lo que supone el 62 % del agua tratada.
También ha indicado que el 85 % de la superficie de regadío se ha transformado a riego localizado y que se han invertido más de mil millones de euros en los últimos ocho años para la modernización de regadíos y sistemas de depuración avanzados.
