El presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, comenta que los productos agrícolas "valen muy poco" en la actualidad, frente al alto coste que tienen gasóleo, fertilizantes, electricidad, herbicidas e insecticidas… Los agricultores españoles deben contratar un alto canon de potencia energética para garantizar los cultivos, que deben pagar todo el año, aunque sólo rieguen "de abril a septiembre; seis meses".
De acuerdo con el presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), Andrés del Campo, desde el cambio de tarifas de julio de 2008, los costes fijos han aumentado más del 1.200 por ciento para este colectivo y, los totales, el 100 ó 120 por ciento.
El responsable estatal de frutas y hortalizas de COAG, Andrés Góngora, reconoce que "nos preocupa mucho" la subida de la electricidad, que provoca la subida del precio del agua, más aún en una provincia con tan escasos recursos hídricos como Almería.
También se dispara el coste de los nuevos productos de lucha biológica contra las plagas -alternativa a los fitosanitarios, como los fungicidas-, entre otros muchos insumos, añade Góngora.