El director del Instituto de Investigación para la protección de cultivos de la Fundación CropLife, Leonard Gianessi, ha señalado que sin plaguicidas la producción de muchos cultivos disminuiría de forma considerable.
Él ha utilizado la banana como ejemplo, destacando cómo los productores dependían de pesticidas para prevenir que la temida micosis Sigatoka penetrasee en la hoja de la banana plátano y provocase una enfermedad a la planta.
El conductor real del uso de plaguicidas en todo el mundo, especialmente en el sector de las frutas y hortalizas, son los consumidores, dijo Gianessi. Los consumidores demandan productos perfectos que no estén dañados por insectos o por cualquier costra.
No se pueden tener ambas cosas. Si cultivamos productos perfectos hay que tener la idea y la realidad del uso de pesticidas, aunque ‘vamos a producir imágenes perfectas, tanto si es para mercado internos o exportación, destacó.